Beneficios del porteo
BENEFICIOS DEL PORTEO
El porteo es algo más que una forma de transportar a nuestros bebés, es una forma de crianza que ya ha dejado patentes sus múltiples ventajas, tanto para el bebé como para los padres.
El hecho de llevar a tu bebé encima es una experiencia maravillosa que las mamás ya experimentan durante 9 meses y que no tiene por qué terminar ahí. Para los papás el porteo puede ser la forma de sentirse más cerca de sus bebés y el inicio de una estrecha relación en la que el bebé no podría sentirse más protegido.
Tanto si se realiza de manera diaria u ocasional, el porteo es una experiencia totalmente recomendable que disfrutaréis sin duda.
A continuación vamos a exponer los beneficios de esta práctica tanto para los bebés como para los padres.
BENEFICIOS PARA LOS BEBÉS
– Los sistemas de porteo como las mochilas ergonómicas o los fulares favorecen una buena postura para el recién nacido, permitiendo que mantenga las piernas flexionadas con las rodillas ligeramente más altas que el culito, tal y como se encuentran en el vientre materno. Esta postura permite un correcto desarrollo de los huesos de la pelvis y las articulaciones previniendo displasia de cadera. Asimismo, contribuye al correcto desarrollo de la columna y el cráneo previniendo deformaciones craneoencefálicas por estar demasiado tiempo tumbado.
– Los bebés que son porteados se sienten más tranquilos y lloran menos puesto que el contacto materno/paterno y el movimiento los relaja y hace que se sientan protegidos.
– Son más sociables al poder integrarse en la vida cotidiana de los padres.
– Duermen mejor y aumentan más rápidamente el peso.
– Disminuyen los cólicos y el reflujo. Llevar al bebé en posición vertical beneficia mucho al sistema digestivo del bebé ya que facilita la expulsión de gases y después de la toma alivia el malestar ocasionado por el reflujo.
BENEFICIOS PARA LOS PADRES
– Fortalece los vínculos afectivos y previene la depresión postparto ya que el contacto continuado con el bebé aumenta el nivel de ciertas hormonas.
– Ayuda a la lactancia materna. El contacto continuo con el bebé estimula la producción de leche y la posibilidad de amamantar en el mismo portabebés facilita la lactancia en cualquier lugar.
– Aporta seguridad a los padres porque se reconocen más fácilmente las necesidades de los bebés estando más tiempo cerca de ellos.
– Ayuda a no tener dolor de espalda. El peso del bebé está sostenido por el portabebés y se reparte por toda la espalda del porteador, adaptándose de forma progresiva al peso del bebé y fortaleciendo la musculatura de la misma. De esta manera, prevenimos los posibles dolores de espalda ocasionados por coger a los bebés en brazos ya que solemos forzar la espalda con posturas incorrectas.